Ciencia pionera
Los científicos argentinos se meten en la conversación global sobre biodiversidad
Investigadores del Conicet participaron de un informe mundial el cual reveló que preservar la naturaleza generaría oportunidades de negocios por unos u$s 10 billones en cinco años
Revertir la pérdida de la biodiversidad, puede generar un impacto positivo sobre la economía y el bienestar humano que ya es cuantificable. Permitiría promover oportunidades de negocios por más de u$s 10 billones y 395 millones de puestos de trabajo en el mundo desde ahora hasta año 2030.
Los datos se desprenden de la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (Ipbes) que presentó un informe estratégico en el cual colaboraron más de cien expertos de cuarenta y dos países, y entre ellos un grupo de científicos argentinos.
La investigación se presentó en el 11° plenario de la plataforma realizado en Namibia (África) y fue aprobado por alrededor de 150 países. La misma apunta a impulsar un cambio transformador para un futuro sostenible, basado en evidencia científica.
Según Ipbes, actuar de inmediato también puede generar importantes oportunidades de negocio e innovación a través de enfoques económicos sostenibles. “Si queremos cumplir hoy nuestros objetivos comunes de desarrollo mundial, necesitamos iniciar una nueva transformación: una que conserve y restaure la biodiversidad de nuestro planeta en lugar de agotarla, al tiempo que nos permita prosperar a todos”, sostuvo Lucas Garibaldi, investigador del Consejo en el Instituto de Investigaciones en Recursos Naturales, Agroecología y Desarrollo Rural (Irnad, Conicet-UNRN), quien copresidió la evaluación final, junto con otros dos expertos en la temática: Karen O´Brien (Noruega/EEUU) y Arun Agrawal (India/EEUU).
Este informe señala los principios y las estrategias para guiar cambios, con el objetivo de detener y revertir la pérdida de biodiversidad que traería serios efectos en las economías globales.
Cerebros argentinos
En la elaboración de este informe participaron también los especialistas argentinos del Conicet, Gervasio Piñeiro, del Instituto de Investigaciones Fisiológicas y Ecológicas vinculadas a la Agricultura (Ifeva, Conicet UBA); Claudia Campos, del Instituto Argentino de Investigaciones de las Zonas Áridas (Iadiza, Conicet-Uncuyo); Sergio Lambertucci, del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y MedioAmbiente (Inibioma, Conicet-Unco); y Pablo Tittonell, del Instituto de Investigaciones Forestales y Agropecuarias Bariloche (Ifab, Conicet Inta).
“Este informe implica un hito muy importante, un trabajo de tres años, que no es solamente un consenso científico sino político ya que fue aprobado por todos los países que forman parte a partir de negociaciones y discusiones”, detalló Garibaldi.
El investigador destacó la relevancia de este reporte para el cambio transformador, debido a que conecta aspectos ambientales y sociales que forman parte de múltiples crisis, y propone cómo salir de ellas.
Señaló que el abordaje propuesto no solo analiza el estado de situación, sino que también se centra en las causas y en proponer estrategias a llevar adelante, tales como: conservar, restaurar y regenerar lugares de valor para las personas y la naturaleza; impulsar un cambio sistemático e integrar la biodiversidad en los sectores más responsables del declive de la naturaleza.
“Por complejo y difícil que sea abordar las causas subyacentes de la pérdida de biodiversidad, sigue siendo posible”, resaltó el científico.
“La historia nos ha demostrado que las sociedades pueden transformarse a gran escala, como ocurrió durante la Revolución Industrial. Aunque aquella época trajo consigo terribles costes medioambientales y humanos, es la prueba de que un cambio fundamental y sistémico es posible, aunque se produjo en un periodo de tiempo mucho más largo que el que necesitamos ahora mismo para el cambio transformador en pro de un mundo justo y sostenible”, dijo.
Oportunidades de negocios e innovación
Según Ipbes, actuar de inmediato también puede generar importantes oportunidades de negocio e innovación a través de enfoques económicos sostenibles. “Si queremos cumplir hoy nuestros objetivos comunes de desarrollo mundial, necesitamos iniciar una nueva transformación: una que conserve y restaure la biodiversidad de nuestro planeta en lugar de agotarla, al tiempo que nos permita prosperar a todos”, indicó Garibaldi.
En el plenario también se lanzó un informe sobre las interrelaciones entre la biodiversidad, el agua, los alimentos y la salud (Evaluación Nexus) donde se presentan más de 70 opciones de respuestas para gestionar con sinergia dichos elementos. Entre los autores se encuentran los argentinos: Virginia Alonso Roldán del Instituto Patagónico para el Estudio de los Ecosistemas Continentales (Ipeec-Conicet), Clara Minaverry, del Instituto de Ecología y Desarrollo Sustentable (Inedes, Conicet Unlu); Sebastián Aguiar, del Ifeva y Lucas Enrico del Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (Imbiv, Conicet-UNC).
La Ipbes es un organismo intergubernamental independiente, creado en 2012, con el objetivo de proporcionar información basada en evidencia y pertinente sobre la biodiversidad del planeta, los ecosistemas y los beneficios que estos brindan a las personas, a los encargados de la toma de decisiones.