Del mar al cielo
Tiburones en el aire: el revestimiento que ayuda a los aviones a reducir emisiones
Una startup australiana desarrolló una tecnología que emula la piel de estos peces cartilaginosos destinada al transporte aéreo. Grandes compañías ya lo prueban
Inspirada en la naturaleza para salvar al planeta. Esa fue la idea que motivó a un grupo de científicos australianos que se inspiraron en la piel del tiburón para desarrollar una tecnología aerodinámica mediante una película adhesiva que se puede aplicar en el exterior de los aviones que puede reducir la resistencia y generar un gran ahorro de combustible reduciendo las emisiones de CO2.
Se trata de la startup MicroTau, que desarrolló la tecnología en conjunto con la Instalación Nacional de Fabricación de Australia (ANFF). Se trata de un material que imita la piel del tiburón que tiene pequeñas escamas superpuestas que al animal le permiten deslizarse en forma suave y rápida sobre el agua.
De esa manera, replicando esa característica presente en el mundo animal, el recubrimiento de esta película artificial también ayuda a los aviones a reducir las turbulencias, aumentar la velocidad de vuelo y reducir los costos de combustible.
Esta tecnología puede escalarse a otro tipo de transporte para reducir la huella de carbono.
MicroTau señaló que las empresas aéreas podrían ahorrar más de 34.000 millones de dólares en costos de combustible y reducir casi cientos de millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono.
Explicó en ese sentido que si se aplica esta película sobre un avión Airbus A380, podría ahorrar más de 5.000 dólares por vuelo desde Sidney a Los Ángeles en combustible y más de 18 toneladas métricas de emisiones de dióxido de carbono.

MicroTau probó el recubrimiento con una variedad de aeronaves, incluidos los de transporte C-130J de Lockheed Martin y el prototipo XB-1 de Boom Supersonic.
Por otra parte, firmó acuerdos con grandes compañías aéreas que buscan implementarlo en sus aeronaves.
Uno es el caso de Vueling, que se convertirá en la primera en utilizar la tecnología tras un acuerdo de colaboración para la certificación del paquete de modificaciones de ondulaciones que ha desarrollado esta empresa y su aplicación en los aviones Airbus A320 que utiliza la empresa.

“Esta innovación no sólo respalda nuestro objetivo de mejorar la eficiencia del combustible, sino que también refuerza nuestro compromiso de reducir nuestras emisiones de CO2 mediante soluciones con visión de futuro”, señaló Franc Sanmartí, director de Sostenibilidad de Vueling.
Aunque Vueling será la primera aerolínea en Europa en utilizar la tecnología de MicroTau, otras como Lufthansa Cargo, Latam, Swiss, Eva Air, Austrian y ANA, ya la usan en sus Boeing 777 y Lufthansa en sus B-747-400. En este caso se trata de otra tecnología similar que desarrollaron Lufthansa Cargo y Basf, y que fue bautizada como Aerodhark.
En tanto, Delta Airlines también se asoció con la compañía aeroespacial australiana para estudiar el uso de esa tecnología.