Día Mundial del Ambiente
El material que conquista el mundo y busca dejar la menor huella
Es un sintético ampliamente difundido por prestaciones y versatilidad. Su eficiencia, menor contaminación y capacidad de reciclaje lo posicionan con mejores credenciales ambientales
En un mundo donde el uso del plástico está ampliamente difundido por sus prestaciones, su versatilidad y sus múltiples ventajas, repensar la forma de gestionarlo y reutilizarlo se convirtió en un desafío clave de la industria. “La sostenibilidad de un material o producto depende en gran medida de cómo se utiliza a lo largo de su ciclo de vida”, indicaron desde la Asociación Argentina del PVC (policloruro de vinilo), uno de los materiales más investigados y probados en términos de credenciales ambientales.
El PVC es un material ampliamente utilizado en una variedad de productos y con gran participación en el sector de la construcción y, a pesar de que ofrece durabilidad y versatilidad, la necesidad de reciclarlo de manera responsable es crucial para impulsar la economía circular y la revalorización de residuos en todos los sectores y productos del plástico.
Los datos de la asociación señalan que el PVC puede reciclarse varias veces gracias a su estructura polimérica que soporta el estrés mecánico y térmico durante las operaciones de reciclaje, sin perder sus propiedades físicas.
Desde 1985 se realizaron al menos 60 evaluaciones confiables del ciclo de vida del PVC, la mitad de las cuales están relacionadas con aplicaciones de construcción. La asociación indicó que el peso de la evidencia de estos estudios confirma que las credenciales ambientales del PVC son sólidas en comparación con los materiales alternativos”.
“El PVC es el plástico con menos dependencia del petróleo. Sólo el 4% del consumo total de este combustible se utiliza para fabricar materiales plásticos y de ellos, únicamente una octava parte corresponde al PVC”, indicó Miguel García, director ejecutivo de la Asociación Argentina del PVC.
Resulta de esta manera un material que desafía los mitos ambientales. En ese sentido, desde la asociación señalaron varios atributos del PVC.
Por un lado, permite administrar mejor los recursos, ya que más del 50% de la materia prima del PVC se deriva de la sal, un recurso disponible en abundancia. El 43% restante de la materia prima, etileno, proviene del petróleo.
Por otra parte, debido a que más de la mitad de su materia prima se deriva de la sal, el PVC se considera uno de los termoplásticos con menor consumo de energía. Además, se produce bajo métodos de fabricación regulados y ambientalmente aceptables, dentro de las directrices internacionales y con generación de emisiones bajas.
En tanto, se trata de un material eficiente, ya que debido al avance en las formulaciones, los productos obtenidos con este polímero sean duraderos, de bajo mantenimiento y livianos, lo que se traduce en un uso reducido de otros materiales alternativos.
Tiene además una menor huella ambiental si se compara con otros productos como material o vidrio y, finalmente, es 100% reciclable.
"El reciclaje de PVC es un componente fundamental en el mercado de la economía circular. Al reciclar y reutilizar este plástico, no solo reducimos su impacto ambiental, sino que también aprovechamos una oportunidad valiosa para que las empresas y toda la cadena de valor contribuyan a un futuro más sostenible", agregó García.
Empresas que le dan otra vida
Una empresa como Veka Argentina, que provee a carpinterías de perfiles de PVC para puertas y ventanas, tiene como política minimizar el desperdicio en procesos productivos, reciclando los restos que se producen. Luego de recolectarlos, estos se reincorporan al proceso de fabricación de nuevos perfiles, reduciendo la dependencia de recursos naturales y disminuyendo su huella ambiental. "Desde 1993 VEKA se preocupa, actúa y recicla PVC y somos pioneros en este tema”, indicó Natalia Ruiz, del área de Marketing de Veka Latam.
La empresa cuenta con tres plantas de reciclaje en Europa. En Chile y Brasil procesan desechos que se generan en producción..
Otro caso es el de Muchtek, empresa con presencia en Argentina, Brasil, Chile y México que fabrica y exporta perfiles para carpinterías y productos arquitectónicos. En 2023 sumó una planta de reciclaje con el objetivo de reutilizar los rezagos provenientes del proceso de extrusión de los perfiles de PVC. Así, se los reprocesa y se utiliza un porcentaje del residuo para la fabricación de zócalos y perfiles auxiliares así como parte de ese material recuperado también se destina a la línea In&Out Design, de productos arquitectónicos en PVC, que incluye tubulares, wall panels y revestimientos.

"Estamos orgullosos de ser la primera empresa fabricante de perfiles para aberturas y productos arquitectónicos de PVC de Latinoamérica en cerrar el círculo de la economía circular", dijo Fernando Martinez, presidente de Muchtek Tecnoperfiles Group.
A su vez Grupo Erpla, empresa de cables de baja tensión, implementó un sistema de recuperación y reprocesamiento de los residuos excedentes del proceso de producción de cables de PVC. Desde la empresa se trabaja en la recolección y clasificación del material excedente en la línea de producción. Luego, pasa por un sistema de triturado, filtrado y pelletizado, asegurando que el PVC reciclado cumpla con estándares de calidad para ser reutilizado en aplicaciones industriales no esenciales.
"En lugar de desechar este material, decidimos implementar un sistema de recuperación y reprocesamiento para contribuir a la economía circular y reducir el impacto ambiental. Así nació nuestro programa de reciclaje interno lo que nos permitió que al día de hoy estemos reciclando aproximadamente 20 toneladas mensuales de PVC", comentó Marcelo Vergagni, presidente de la compañía.