Salud y ambiente
El hospital que cambió la receta: eliminan latex y usan energía verde
Es pionero en Argentina en encarar acciones de sostenibilidad en una industria altamente contaminante. Conocé el caso
Por: Eugenia Langone mail
“Si fuera un país, el sector salud sería el quinto emisor de gases de efecto invernadero, somos una industria altamente contaminante”, afirmó Verónica Torres Cerino, toxicóloga y pediatra formada en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y actual gerenta de Sustentabilidad del Hospital Universitario Austral, donde, desde principio de los 2000, trabajan en un plan de descontaminación. La eliminación del látex y el funcionamiento con energías renovables se cuentan entre los hitos de ese proceso.
Por su formación - además dirige el Servicio de Toxicología del hospital - Torres Cerino entiende como pocos la relación entre la salud y el ambiente. “No se puede tener gente sana en un mundo enfermo”, dijo durante la presentación organizada por Moverse Sostenibilidad que se realizó en la sede Rosario de la Universidad Austral y de la cual participaron distintos referentes del sector de la salud, para conocer una experiencia existosa en el camino hacia formas de acción más sostenibles.
La frase se expresa en cifras concretas: el 25% de las enfermedades y muertes a nivel mundial se deben a causas ambientales. Y detalló que la crisis climática provocó el incremento de enfermedades emergentes, estrés por calor, intoxicaciones ambientales en espacios de trabajo y viviendas, cáncer, malnutrición e infertilidad, enfermedades cardiovasculares y respiratorias.
Es en ese contexto, señaló al sector salud como “una de las industrias más contaminantes” y apuntó específicamente “a los hospitales como una oportunidad” para el cambio.
“Desde el inicio, el Hospital Universitario Austral comenzó a trabajar con historias clínicas electrónicas, una ventaja, ya que cada resma de papel significan 17 árboles”, dijo para dar cuenta del proceso que se inició ya en los años 2000 con el diseño de un plan alineado a la Agenda Global, se consolidó en 2008 y en 2011 hizo punta con el Latex Free Program, un programa para erradicar el uso del látex.
El primer hospital sin látex
Torres Cerino hizo hincapié en los procesos de compra de insumos y marcó allí una de las claves del proceso. “Hay que comprar solo lo que se necesita porque el 70% de los gases de efecto invernadero que emite el sector provienen de la cadena de suministros”, señaló a la hora de marcar estrategias.
Dejar materiales altamente contaminantes es otro de los ejes que marcó en el recorrido. “El 9% de la población sufre enfermedades por el uso de látex”, detalló para fundamentar la decisión de sumarse al Latex Free Program que el efector tomó en 2011.
Ese proceso, indicó la especialista, fue parte del Programa de Químicos otra de las iniciativas que llevaron adelante mediante la cual se buscó eliminar tanto el látex como los parabenos y petroleros, así como el PVC.
“Somos el primer hospital de Argentina seguro y sin látex en áreas ambulatorias y de internación”, dijo en relación al programa, a lo que agregó si bien hay algunos insumos contaminantes que aún deben seguir utilizando, la política es “lo que no puede ser eliminado, debe controlarse”, planteó.
Un ejemplo de eso son los insumos anestésicos que contienen gases, uno de los principales contaminantes en los efectores de salud. “No dejamos de anestesiar a los pacientes, pero sí buscamos comprar mejores insumos”, afirmó.
Medir para cambiar
El proceso que llevó adelante el centro de salud y la formación de profesionales se inició en 2015 a partir de las mediciones ambientales que les permitieron tomar decisiones claves. “Hay que medir para entender”, destacó Torres Cerino, y reiteró que el resultado de esto les permitió conocer que el 70% de las emisiones provenían de la cadena de suministro.
“Con eso, empezamos a trabajar fuertemente sobre las compras. Se adquiere exclusivamente lo que se necesita, porque si bien es cierto que se puede reciclar, esto alcanza apenas al 1%”, indicó.
Además, se estableció un “semáforo de sostenibilidad” con los proveedores y se comenzaron a utilizar, por ejemplo, cajas retornables para la entrega de insumos.
Puntualizó también que otro de los principales trabajos que llevaron adelante fue terminar con los residuos domiciliarios. “La mayor parte de la basura era de cucharitas, vasitos y descartables”, dijo y también en economía circular a partir de la disposición de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE).
Por otro lado, el Hospital Austral - como otras empresas altamente demandantes de energía - pusieron el ojo en las renovables. Torres Cerino indicó que lo pusieron en agenda y lograron llegar en la actualidad a comprar 100% de energía verde.
Además, para fomentar el ahorro en ese sentido, se implementaron acciones de movilidad, como viajes colaborativos y el uso de combis para los traslados de personal.
“No todas las decisiones pueden tomarse en un momento. Nosotros teníamos un alto impacto de energía, pero tuvimos que esperar varios años para poder comprar como ahora lo hacemos al 100% de renovables”, dijo y aclaró que “hay que encontrar la ventana de oportunidad para avanzar”.


