Finanzas verdes
Sumatoria captó $1. 800 M para financiar proyectos sustentables
La asociación civil que gestiona financiamiento para iniciativas con impacto emitió la segunda serie de sus ON Sustentables y obtuvo ofertas por casi el doble
Por: Sandra Cicaré mail
La asociación civil Sumatoria encontró un mercado ávido de financiar iniciativas sustentables. Así quedó reflejado esta semana cuando logró colocar en forma exitosa su nueva serie de Obligaciones Negociables (ON) Sustentables por $ 1.825 millones destinadas a financiar proyectos de pymes, instituciones y cooperativas que tengan un impacto social y ambiental, que tuvo una gran aceptación al recibir una sobreoferta de casi el doble de lo previsto, por más de $3.000 millones.
Se trata de la sexta colocación y la segunda de una ON Sustentable de Sumatoria. La primera fue en marzo de 2024, con la cual obtuvieron $800 millones con ofertas muy por encima de ese monto, lo que les permitió conseguir una tasa muy beneficiosa. Algo similar ocurrió en este caso. Los instrumentos se emitieron por un valor nominal de $1.825 millones a tasa Badlar + 5,49%.
Esta nueva ON, como la anterior, tuvo un fuerte respaldo que le otorgó robustez al instrumento. Fue avalada por los bancos Comafi, Galicia, Santander, BBVA, Hipotecario y Supervielle y el monto emitido supera ampliamente no sólo del anterior sino también la de todas las colocaciones históricas hechas por Sumatoria, que completa con esta emisión un crecimiento de 1200% versus el año anterior. Las ON Clase VI se emitieron bajo el régimen Pyme CNV Garantizado.
“Nuestra sexta ON representa un crecimiento de más del 100% en comparación a la anterior”, dijo Andrés Schapiro, director de Finanzas de Sumatoria y explicó que, “por un lado, para nosotros es una herramienta que permite atender a una demanda creciente de crédito para inversión de impacto social y ambiental positivo y, por otro, le brinda a los actores del mercado de capitales un instrumento para invertir y generar impacto en la economía real, lo que representa impacto-impacto para cada una de las partes”.
Una dinámica exitosa
“Lanzar una ON es parte de nuestra estrategia de financiamiento”, detalló Fátima Ochoa, directora de Impacto de Sumatoria, quien detalló que “la buena recepción que tienen en el mercado nos permitió conseguir una tasa más baja, algo fundamental porque nos permite, a su vez, ofrecer créditos con esas características”.
“Eso es lo que nos diferencia”, agregó Ochoa y planteó que buscan lograr el acceso al financiamiento a organizaciones que no pueden acceder y ser vehículos financieros que ponderen el impacto que genera una organización o una empresa”.
Sumatoria consiguió ante Bolsas y Mercados Argentinos (Byma) y la Comisión Nacional de Valores (CNV), la inclusión en el Panel de Bonos Sociales, Verdes y Sustentables (Bonos SVS) de esta nueva emisión por la naturaleza sostenible de los proyectos a financiar.
La ONG, que fue creada hace una década para gestionar el financiamiento y ampliar el acceso al crédito de sectores que tradicionalmente no pueden acceder al sector bancario tradicional, se enfoca en apalancar proyectos orientados a prácticas sostenibles, como aquellos vinculados con la economía circular, la inclusión financiera, la agroecología, la ganadería regenerativa, la conectividad, energías limpias, y alimentos saludables, así como la conservación y regeneración ambiental, la infraestructura sociourbana, y el respaldo a organizaciones y empresas de impacto.
Para lograr el etiquetado sustentable la ON fue verificada por SMS Buenos Aires - una firma especializada en servicios de auditoría - a través de la emisión de un informe de segunda opinión (SPO).
Por otra parte, el estudio jurídico Beccar Varela, asesores especializados en el mercado de capitales y organizaciones de impacto en Argentina, fue el que estructuró el instrumento y asesoró a Sumatoria en el proceso.
Además, 19 Sociedades de Garantía Recíproca (SGR) coordinadas y estructuradas por la Cámara Argentina de Sociedades y Fondos de Garantía (Casfog), brindaron garantías sindicadas que permitieron fortalecer el esquema de contragarantía previsto a favor de los bancos. En ese universo participaron Argenpymes; Acindar Pymes; Crecer; Affidavit; Afianzar; Aval Federal; Aval Rural; Avaluar; Campo Aval; Cuyo Aval; FID Aval; Garantías Bind; Innova; Integra pymes; Movil; Neuquen Pymes; Potenciar; Resiliencia y Unión.
También la ON cuenta con una contragarantía para avalar a dichas entidades que consiste en una cesión de derechos de cobro y certificados de distintas SGRs, para lo cual se designó a TMF Trust Company (Argentina) SA como agente de la garantía.
Un puente
Como vehículo o puente entre los inversores que buscan colocar su capital en proyectos de impacto y las empresas, instituciones o cooperativas que lo necesitan, adoptó una metodología para medir esos alcances, a la que denominan “econometrización del impacto”.
Mediante esta herramienta, las condiciones de cada oferta de crédito - por ejemplo niveles de tasa o plazos - se establecen en base al puntaje o nivel de impacto que tenga la iniciativa a financiar.
“Hay un equipo grande dedicado a analizar cada caso que llega y, además de tener en cuenta los requisitos mínimos para acceder, también analizamos el impacto, la salud financiera, entre otras cuestiones”, explicó Ochoa. También dijo que se busca estar en contacto con quienes desarrollan los proyectos para despejar dudas, y hacer encuentros cara a cara, un espacio que en Sumatoria definieron como “El cafecito”.
En la instancia posterior de seguimiento y evolución del financiamiento desde Sumatoria analizan en qué medida estos fondos le permitieron a una empresa o cooperativa, por ejemplo, reducir su impacto ambiental pero también mejorar su productividad, sus ventas y también la empleabilidad.
Sumatoria financia tres grandes perfiles como son proyectos vinculados a la economía social (por ejemplo cooperativas de trabajo), empresas u organizaciones donde el core del negocio sea resolver una problemática social y ambiental y, finalmente, instituciones de microfinanzas.
Dentro de este universo hay distintos tipos de verticales que van desde empresas agrícolas, ganadería regenerativa, producción orgánica, micro productores. También proyectos que buscan la transformación de la matriz energética, ofreciendo al mercado alternativas de energías renovables, como paneles solares, así como otros vinculados con la economía circular a través del reciclaje. “Este año recibimos muchos de éstos últimos ligados a trabajar con plásticos o vidrios reciclados, así como recuperación de textiles y producción de miel o alimentación saludable y agricultura y ganadería sustentable”, detalló Ochoa.
Del otro lado, los inversores que apalancan este financiamiento son en general institucionales, mayoritariamente “bancos o empresas que buscan tener dentro de su portfolio esta variedad de iniciativas”, dijo Ochoa y agregó que “cada vez son más a los que les interesa invertir en algo que tenga la trazabilidad del impacto”.
Esto además está blindado por la confianza que le tienen a la ONG que “tiene una excelente cumplimiento de sus obligaciones, lo que genera una gran confianza en el mercado”, agregó, además de tratarse de instrumentos atractivos en cuanto a la rentabilidad que ofrecen.
Desde 2020 hasta fines de 2023 Sumatoria financió 112 proyectos en 11 provincias y pretende ampliar ese horizonte a medida que siga obteniendo financiamiento en el mercado de capitales.