Hogar
05.08.2024

Proyecto de Lowilab

Energía: una casa que se las arregla sola

En Roldán (Santa Fe) construyen la primera vivienda con eficiencia energética A, diseñada para ser carbono neutral al producir anualmente la misma cantidad de energía renovable que consume

Por: Florencia Boeri

Una casa diseñada para ser neutral en carbono y producir anualmente la misma cantidad de energía renovable que la que consume, está plantando los cimientos de la sustentabilidad en el sector de la construcción.

Se trata de Casa Alba, una vivienda residencial ubicada en la localidad de Roldán - provincia de Santa Fe - que va camino a obtener el etiquetado A y que fue desarrollada por Lowilab, un estudio de arquitectura de la ciudad de Rosario especializado en proyectos sustentables. 

El objetivo de Lowilab, que fue desarrollando el proyecto codo a codo con el propietario de la vivienda, es “reducir la demanda energética, maximizar la eficiencia de las instalaciones y a la vez generar la energía renovable necesaria para consumo”, detalló Natalia Feldman, directora del estudio de arquitectura.

La casa posee una aislación térmica muy alta en toda la envolvente: paredes, pisos y techos. Además, las ventanas son altamente eficientes gracias a la protección solar calculada bioclimáticamente. A eso se suma la instalación de un calefón solar, luces Led domotizadas, paneles fotovoltaicos y geotermia. 

La geotermia utilizada es un tipo de climatización pasiva: consiste en caños enterrados a tres metros de profundidad, donde la temperatura de la tierra es cercana a la promedio anual de la zona, alrededor de 18°C.

A través de los caños se fuerza la circulación del aire desde el exterior, que luego ingresa filtrado al interior. Este sistema se aplica como el aporte principal a la climatización, permitiendo mantener la casa más fresca en verano y más cálida en invierno, con un consumo de energía prácticamente nulo.

Feldman explicó que Casa Alba va a contar también con recuperación de agua de lluvia de aporte para riego y limpieza de veredas, inodoros doble descarga, aireadores en griferías, espacio para huerta orgánica con riego por sensores, y producción de agua caliente solar.

Los costos de ser sustentable

¿Es más caro construir este tipo de viviendas?, es la pregunta ineludible que surge a la hora de pensar en un proyecto de estas características. Feldman explicó que si bien existe un costo adicional en la mejora de la aislación térmica y de los equipos que integran el proyecto de Casa Alba en particular, no es significativo al momento de considerar el total de la inversión y los costos actuales de la energía. 
“El sobrecosto es menor al 10% respecto a una vivienda hasta ahora tradicional”, especificó.

Explicó que muchos de los aportes a la eficiencia vienen de la mano del diseño bioclimático, esto es considerar las mejores orientaciones para permitir ingresar el sol en invierno y no en verano y posicionar bien las ventanas para una correcta ventilación cruzada. “Son estrategias que no tienen impacto en el costo final, pero sí en el ahorro de consumo de calefacción y refrigeración, y en el confort térmico que se siente al habitarla”, detalló la arquitecta.

"El sobrecosto de una vivienda de estas características es menor al 10% respecto de una tradicional"

“Casa Alba es neutral en carbono y el Índice de Prestaciones Energéticas (IPE) es igual a cero. Al realizar los cálculos para el futuro etiquetado obtendremos la Etiqueta A”, asegura Feldman. Pero ¿qué significa ser Etiqueta A?

Tal como ocurre con los electrodomésticos, las casas deberán mostrar el consumo de energía por año en calefacción, refrigeración, iluminación y generación de agua caliente sanitaria. Así lo establece el Programa Nacional de Etiquetado de Viviendas (Pronev), que lleva más de un año aprobado y cuyo objetivo es implementar un sistema de etiquetado de eficiencia energética unificado para todo el territorio nacional. 

Para el mismo se generó una herramienta de cálculo online para procesar los datos y obtener el Índice de Prestaciones Energéticas que queda vinculado luego a la calificación correspondiente. 
Feldman indicó que muy pronto las inmobiliarias tendrán que publicar, además de las fotos de las viviendas, las etiquetas que le corresponden según consumo. Estas van a ir de la A hasta la G y se estipula que habrá beneficios impositivos para aquellas que sean de bajo consumo.

“La construcción de una casa sustentable con etiqueta A es una inversión en el futuro. No solo se trata de un ahorro económico en el largo plazo por la reducción en el consumo de energía, sino también de una inversión en calidad de vida y en la preservación del ambiente”, expresó.

Actualmente sólo 7 de las 23 provincias en Argentina participan del Pronev y lo implementan. Santa Fe es una de ellas. 

La directora de Lowilab indicó que desde el gobierno provincial convocaron al Colegio de Arquitectura y Urbanismo, al de Ingenieros Civiles, al de Ingenieros Especialistas y al de Maestros Mayores de Obra, para comenzar la formación sobre etiquetado para que los profesionales puedan desempeñarse como certificadores. Otro incentivo es el programa provincial Prosumidores, la iniciativa del gobierno de Santa Fe que busca que a través de la autogeneración de energía que los excedentes puedan ser inyectados a la red eléctrica.

arrow_upward