Un pack verde
Tres casos: cómo la agroindustria acelera el giro sustentable
Grandes compañías explican cómo hicieron para reducir la huella ambiental en su proceso productivo. Aquí los detalles
Por: Juan Ignacio Paur mail
Reducción de emisiones, uso de materiales renovables, valorización de residuos y restauración de ecosistemas son, en diferente escala, los caminos que tomó el sector agroindustrial para alcanzar la tan ansiada meta de la sostenibilidad, y que en primera persona contaron tres empresas que están en esa ruta como Tetra Pak, Adecoagro y Molinos Agro.
Convocadas por Plataforma Puma, la startup argentina que acompaña al sector agroindustrial en la medición y reducción de su impacto ambiental, los referentes de las distintas empresas líderes en Argentina y la región, compartieron estrategias en materia de sustentabilidad, trazabilidad y gestión de carbono, que no sólo incluyen prácticas sino también la adopción de herramientas tecnológicas que permiten el seguimiento y reporte de métricas de sostenibilidad de manera clara y confiable.
Tetra Pak: los envases sostenibles
Lucía Spataro, representante de Tetra Pak Argentina, explicó que los envases juegan un rol estratégico para la compañía en la transición hacia modelos productivos más responsables y sustentables.
La multinacional, líder en procesamiento y envasado de alimentos que lleva más de medio siglo operando en Argentina, orientó sus políticas hacia la innovación sustentable y el uso de materias primas renovables.
Spataro detalló que desde 2008, todas sus plantas de producción trabajan con cartulina 100 % certificada FSC, y actualmente el 83% de sus envases contiene materiales renovables. Por otra parte, orientada a reducir la huella en el Alcance 2, la compañía logró actualmente bajar un 25% su consumo energético y un 47% el uso de agua respecto a 2015, además de reciclar el 95% de sus residuos industriales.
Además, se enfocó en el proyecto de restauración de Mata Atlántica, con el que comenzó en 2022 en 80 hectáreas piloto y con el objetivo de alcanzar 7.000 hectáreas en diez años, donde promueve la reforestación con especies autóctonas y trabajo comunitario.
“Con estas iniciativas, Tetra Pak refuerza su estrategia global de avanzar hacia un envase totalmente renovable y neutro en carbono”, dijo la ejecutiva.
Adecoagro: medición y reducción de huella
Patricio Geretto, analista de sustentabilidad de Adecoagro, se enfocó en medir y reducir su huella de carbono. La empresa, con operaciones en Argentina, Brasil y Uruguay y produce granos, arroz, azúcar, etanol, energía y lácteos, se rige por estándares internacionales como el Protocolo GHG y la Norma ISO 14064, y fijó como meta reducir un 20% la huella de carbono hacia 2030 en relación con 2021.
Para eso, Adecoagro desarrolló calculadoras específicas para medir emisiones en arroz, lácteos y granos en Argentina y Uruguay.
En el negocio lácteo opera cuatro tambos de máxima productividad, dos plantas integrales y dos biodigestores; en arroz gestiona 64.000 hectáreas, seis molinos y tres plantas de secado; y en granos cultiva 240.000 hectáreas con dos plantas de acopio y dos de procesamiento.
La compañía también participa en programas de captura de carbono tokenizada, como Igaris de Bayer y Viterra, y promueve el acceso a herramientas de medición en la mesa láctea.
Molinos Agro: eficiencia en toda la cadena
La ingeniera ambiental Ivana Odone mostró cómo Molinos Agro reduce su impacto ambiental y mejora la trazabilidad de sus operaciones. La compañía alimenticia combina gestión de residuos, eficiencia energética y abastecimiento agrícola sostenible.
Explicó que a través de su programa de valorización, el 83% de los residuos generados en sus plantas se recicla o reutiliza, y en los últimos cuatro años logró reducir un 69% los residuos industriales. En energía, el 36% proviene de fuentes renovables y más del 75% de la utilizada en operaciones es autogenerada.
Molinos Agro participa en la plataforma Visec, la plataforma de sustentabilidad ambiental y social que reúne a miembros de las distintas cadenas de la agroindustria, orientada a responder a las exigencias de la Unión Europea.
El panel de Plataforma Puma, coordinado por Sebastián Galbusera, co-founder y Chief Product Officer de la startup, mostró cómo la innovación y la economía circular ya son factores clave para la competitividad del sector.
La plataforma, fundada en 2019 por Inés Di Nápoli, desarrolla soluciones digitales para calcular la huella de carbono y promover la agricultura regenerativa y es la primera calculadora de Latinoamérica certificada a nivel internacional reconocida con estándares como los del IPCC.
Registra prácticas agrícolas, indicadores de suelo y clima, y estima la huella ambiental con cálculos geolocalizados, monitoreando rotaciones, deforestación y uso de fitosanitarios.
Por otra parte, permite medir la huella de carbono del abastecimiento de granos con trazabilidad de origen, aportando información clave para la toma de decisiones sustentables.
Su asociación con el esquema europeo 2BSvs otorga validez internacional en la certificación de biocombustibles y materias primas. Actualmente es utilizada por más de 1.300 empresas, abarca 1,5 millones de hectáreas monitoreadas y procesa millones de solicitudes diarias, convirtiéndose en una herramienta estratégica para medir y gestionar la sustentabilidad en la agroindustria, con resultados auditables y escalables.


