Los plásticos se fueron a la plaza

Decidieron darle un nuevo destino a los plásticos y a través del reciclaje encararon la fabricación de mobiliario urbano, basados en los pilares del eco diseño y con matricería propia. Así nació Quanta Reciclaje, una empresa de la ciudad de Paraná (Entre Ríos) que comercializa sus productos en todo el país y en 2023 dio un salto y facturó 120% por encima del año anterior.

La empresa fabrica productos con plásticos reciclados, con un bajo impacto ambiental e ideales para espacios públicos e instituciones educativas. Comenzó su actividad en en 1996, gracias a una vinculación con distintos municipios del interior de la provincia de Entre Ríos, con quienes comenzó a trabajar en un sistema que resultó un éxito: un trueque de residuos plásticos por productos que luego se manufacturaban. Esa novedosa actividad trajo aparejado un reconocimiento por parte de empresas nacionales y multinacionales muy grandes, que la ayudaron a continuar creciendo.

"En 1996 arrancamos a fabricar bancos, papeleros y elementos de seguridad vial, y después incorporamos juegos, subibajas, calesitas, máquinas para hacer ejercicio físico. Con un equipo de ingenieras, desarrollamos equipamiento para gimnasia de baja intensidad, no violentos, y nos está yendo muy bien. Fabricamos juegos infantiles, pérgolas, reductores de velocidad, elementos ornamentales y productos a medida", indicó Norberto Levy, titular de Quanta Reciclaje y arquitecto, en diálogo con Punto Biz.

Respecto a cómo es el proceso de conversión de residuos a productos listos para entregar, Levy explicó: "Todos los materiales, desde el metal hasta el plástico, se moldean con dos elementos fundamentales: presión y temperatura. Se eleva la temperatura de un plástico sólido, para hacerlo una masa viscosa, y con presión se lo introduce dentro de un molde de alta complejidad (se trabaja con un equipo de CNC), y luego se lo puede colorear".

Dos elementos distinguen a Quanta: la calidad de sus productos y el desarrollo de campañas educativas que tienen el fin de concientizar a la población sobre la importancia de proteger al medioambiente. Para ello, la empresa creó una fundación llamada Quanta El Bien Hacer.

"Vendemos en todo el país, tenemos mucha dispersión territorial siendo una empresa no muy grande en un lugar que no es central en Argentina. En algunos lugares tenemos distribuidores y las redes sociales nos resultan muy favorables en ese sentido. El haber trabajado con empresas grandes genera exhibición en distintos lugares del país y tenemos instalados productos desde Purmamarca hasta las Cataratas del Iguazú, Mendoza, Córdoba, Buenos Aires, La Pampa, el sur, en Rosario", aseguró. Y agregó: "En Rosario, el cliente fue Coca Cola, que donó los productos a la Municipalidad para que los coloquen en cinco plazas. También hemos exportado. Vendimos en Uruguay, Paraguay y Chile".

La planta de producción está ubicada en el Parque Industrial General Manuel Belgrano de la ciudad de Paraná, que fue creado en 1973. La fábrica tiene una superficie de 8800 m2 (casi una hectárea) y una superficie cubierta de 1.000 m2. "En cuanto a la capacidad instalada, yo soy amante de tener muchas máquinas. En función de las máquinas que tenemos, estamos trabajando a un 30% o 40%, lo cual nos permite, teniendo gente preparada, crecer rápidamente si la demanda así lo exige", expresó.

Levy asegura que no ve en su tarea una mera transacción comercial, sino una actividad que lo apasiona y une a los vecinos y a los municipios. "En la medida en que los residuos son recolectados por la comunidad de forma organizada, se genera un buen vínculo entre el vecino y su gobierno. Y por otro lado, al recibir como contraprestación mobiliario de excelente calidad y diseño, la gente encuentra una satisfacción que la motiva a seguir sumándose a cuidar el medioambiente", manifestó.

En relación a los objetivos a futuro, concluyó: "Queremos desarrollar mucho más la línea de diseño de la empresa para responder al interés de muchos clientes (empresas, personas y municipios). Hoy hay un cambio muy grande en la visión de los temas ambientales. También estamos abocados a obtener certificaciones que tengan que ver con huellas de carbono, con Empresa B, con el uso de plásticos reciclados. Tenemos certificado del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti) de que el 100% de las maderas que utilizamos están hechas con plástico reciclado. Eso es algo que las empresas y los municipios están buscando cada vez más: la calidad certificada".