Golosos y sostenibles
Crearon un chocolate sin cacao que conquista las góndolas europeas
Una startup alemana sintetizó consumo responsable y producción sostenible en un producto que es insumo para otras industrias
Los paladares golosos no necesariamente tienen que resignar un consumo responsable. Esa es la premisa que se plantearon para la creación de ChoViva, una alternativa sostenible al chocolate elaborado con ingredientes como semillas de girasol, avena y leche desnatada en polvo, producida por la startup alemana Planet A Foods, originaria de Munich.
Este innovador sustituto del chocolate fue desarrollado en 2021 por los científicos Sara y Maximilian Marquart, conocidos como “hermanos chocolate”, quienes buscaron una respuesta frente al desafío que imponía la cadena de suministro global del cacao, que en su mayoría proviene de países africanos como Costa de Marfil o Ghana, que enfrentan graves fenómenos por efecto del cambio climático.
Este producto disruptivo en la industria chocolatera combina sostenibilidad, eficiencia industrial y una experiencia de sabor similar al chocolate tradicional.
A diferencia de los métodos convencionales que dependen de los granos de cacao, ChoViva se elabora a partir de semillas de girasol de origen regional, que son procesadas mediante técnicas adaptadas de fermentación y tostado. Además está elaborado con azúcar, grasas vegetales y leche en polvo o harina de semillas de girasol (versión vegana), según la receta.

El resultado es un producto que conserva el sabor y la textura del chocolate clásico, pero con una huella ambiental significativamente menor.
ChoViva no es un producto único, sino que es un ingrediente desarrollado para servir como alternativa sostenible a la industria alimentaria y genera aproximadamente un 80% menos de emisiones en comparación con el chocolate convencional, debido a que tiene una cadena de suministro más corta y sin impacto en zonas de deforestación tropical.
La compañía, en colaboración con Carbon Cloud, calculó la huella de carbono para cada versión de ChoViva. "La huella climática depende de la receta específica utilizada y varía entre 1,3 kg de CO2 equivalente/kg (receta vegana) y 2,4 kg de CO2e/kg (receta blanca), contra 9,6 kg de CO2e/kg y 15,2 kg de CO2e/kg respectivamente en el caso del chocolate tradicional", detallaron.
La producción de chocolate requiere una cantidad significativa de agua, unos 24 mil litros por kilo y ChoViva utiliza solo 1.400 litros "ya que el cultivo de nuestros ingredientes consume mucha menos agua", indicó la empresa y detalló que en términos de huella hídrica, es 17 veces más sostenible que el chocolate.
La empresa ya produce más de 10 mil toneladas anuales en Europa y desde 2022 cuenta con planta propia en Pilsen, en República Checa, donde produce a gran escala. Está presente con más de 30 productos en supermercados y tiendas especializadas de Alemania, Austria, Suiza, Francia y el Reino Unido, bajo un sello distintivo que permite al consumidor identificar rápidamente esta alternativa sustentable.
La propuesta de ChoViva llega en un momento en que los costos del cacao alcanzan máximos históricos, impulsados por fenómenos climáticos extremos, enfermedades de los cultivos y problemas estructurales en los países productores.
En este escenario, las alternativas vegetales sostenibles con escalabilidad industrial despiertan el interés no solo de los consumidores, sino también de fabricantes y retailers europeos que buscan diversificar sus líneas de productos.