Inversión verde
La gran alimenticia de Rosario que se ilumina para consumir menos energía
Invirtió u$s 160 mil en un parque solar que le permitirá abastecer el 50% de su consumo total con energía limpia. Se inaugura el viernes. Además lanzará nuevos productos
Por: Sandra Cicaré mail
La empresa alimenticia La Cumbre, nacida hace 40 años en Rosario y con cuatro establecimientos fabriles en Argentina, está a punto de inaugurar un gran parque solar, montado en su establecimiento ubicado en el Parque Industrial de Alvear, que le permitirá abastecer el 50% del consumo total de sus operaciones con energía renovable.
La obra, que demandó una inversión de u$s 160 mil y que fue financiada mediante una línea para proyectos sustentables de una entidad bancaria, consta de 186 paneles solares que permitirán lograr una reducción de 32 toneladas de CO2 equivalente, lo que implica plantar 530 árboles por año.
“El año pasado con la agencia de innovación Fixit elaboramos una estrategia de sostenibilidad macro, transversal y decidimos alinearla con el propósito empresarial que es promover el bienestar de las personas a través de una alimentación equilibrada, que mejore la calidad de vida y contribuya a la sostenibilidad de la comunidad y el medio ambiente”, detalló Virginia Alabarce, integrante del equipo directivo de la firma y gerenta de recursos humanos y sostenibilidad.
El plazo de amortización de esta inversión es de cinco años, pero para La Cumbre termina siendo un negocio ventajoso. En base a la proyección futura que realizaron, la estructura de panelería solar - que tiene una vida útil de 30 años - les permitirá recuperar unas 1.000 toneladas de CO2 equivalente, lo que significa reforestar un área similar a 54 canchas de fútbol.
Un plan
Según detalló Alabarce, la estrategia está basada en tres ejes: producción sustentable; seguridad alimentaria e inclusión social; y bienestar laboral y gestión de impacto.
Con esa base firme, la empresa empezó a trabajar junto a la empresa rosarina Sux Solar, que asesora en gestión energética y comenzaron primero midiendo la huella de carbono y con ese resultado, elaboraron su plan de acción que derivó en el montaje del parque solar. “Lo que más incide en nuestra huella, lo que genera el mayor número de emisiones dentro de nuestro proceso es el uso de la energía eléctrica y el gas natural”, adelantó Alabarce, al precisar parte de los resultados de la medición.
Con esos números sobre la mesa, la empresa alimenticia se puso en acción. “Nos pusimos como desafío migrar la matriz energética a fuentes limpias y con Sux Solar determinamos la posibilidad de instalar un sistema de 186 paneles solares distribuidos sobre el techo de la nave industrial y otro más que es un parking solar”, detalló Alabarce y precisó que esa cantidad les permitiría reemplazar el 50% del consumo de la planta con fuentes de energia limpia.
Además, en el mismo lugar y aprovechando la inversión, instalaron un cargador de carga para, en el futuro, abastecer a un camión eléctrico en el mismo predio.
La inversión se apalancó con el financiamiento de una entidad bancaria a “una tasa muy conveniente”, detalló Alabarce y explicó que hoy los bancos ponen a disposición líneas de créditos para este tipo de proyectos sustentables. “Hubiese sido muy difícil antes”, dijo la ejecutiva quien explicó que esto es un paso decisivo para la compañía porque por un lado “permite optimizar nuestro proceso productivo”, pero además por el “impacto positivo en el medio ambiente”, agregó.
Nuevos lanzamientos
Para dar respuesta al segundo objetivo que se trazaron sobre seguridad alimentaria, Alabarce adelantó que La Cumbre lanzará en el corto plazo tres nuevos productos al mercado para acompañar “las nuevas tendencias de consumo que van direccionadas a promover una alimentación equilibrada”, dijo.
Se trata de una línea de magdalenas sin sellos (octógonos) manteniendo el mismo perfil nutricional y dentro de los parámetros admitidos por código alimentario. Además dos nuevos budines: un carrot cake y un banana cake.

Eso se sumará a la línea que ya está disponible de galletitas fortificadas que se destinan a instituciones y comedores escolares y a los productos sin TACC que también posee la firma.
Para responder al tercer objetivo de bienestar laboral y gestión de impacto, la industria alimenticia está capacitando en habilidades blandas, por caso educación financiera, para todo su personal independientemente de la función que cumplan en la empresa. También en 2025 buscan desarrollar dentro de ese plan, “la figura del mentor”, dijo Alabarce, para que haya una formación horizontal donde “cada compañero forme a quien tiene a su lado”, agregó.
Una decisión
Alabarce explicó que la compañía ya viene desarrollando buenas prácticas en sus operaciones hace décadas, mediante gestión de residuos, uso eficiente de recursos, vínculo con proveedores y la comunidad. Y el cambio en la matriz energética es parte de ese proceso. “Nuestra meta es que la sostenibilidad nos represente como empresa y todas nuestras decisiones estratégicas estén puestas en la triple mirada”, aclaró la ejecutiva quien además planteó que en este esquema el vínculo cadenas abajo y arriba es decisivo.
“Hay un proceso de evaluación de proveedores no sólo en cuanto a la calidad y seguridad sino también socioambiental. Queremos que estén alineados con nuestros valores”, dijo-
Lo mismo ocurre con la propia empresa, ya que La Cumbre trabaja a fason para clientes de primera línea como Carrefour o Día, entre otros. “Producir de esta manera, tener plantas certificadas, nos posiciona de otra forma”, dijo Alabarce al dar cuenta de que el proceso de sostenibilidad es una cadena, que según dijo puede asumir cualquier empresa. “No tenés que ser una gran corporación para hacerlo, con pequeñas acciones se puede generar un impacto real, y por tanto, hay que desmitificar esto”, agregó y dijo: “va más allá de lo económico.
“Hoy es algo voluntario, pero en un par de años será mandatorio y el que no se suba a esta ola, quedará afuera”, concluyó.