Ganaron un concurso
Una bodega que cultiva su propio packaging
Una startup de Mendoza ganó el desafío a la innovación lanzado por Wines of Argentina y Espacio Lodo por un proyecto de biocajas. Una solución sustentable para la industria
Con restos de poda de viñedos y hongos desarrollaron un packaging ecológico, resistente y novedoso para embalar sus propios vinos con un materiales vivos y familiares con el producto, ya que provienen de la misma planta que le dio origen.
Esa fue la tarea que se puso como meta la startup mendocina 4m3.bio, nacida de la bodega Costaflores ubicada en Perdriel (Luján de Cuyo) que produce la línea de vinos Mike Tango Bravo (MTB), y que resultó ganadora del desafío de innovación lanzado por Wines of Argentina (WofA), responsable de la promoción del vino argentino en los mercados mundiales y el Espacio Lodo, denominada “Vino la Idea”.
Este desafío se enmarca en el Programa Integral de Sostenibilidad para el Vino Argentino "Sustenta Vitis", desarrollado por WofA y posibilitado por Al Invest Verde con fondos de la Unión Europea.
El proceso involucró diferentes instancias para definir la idea ganadora que obtuvo un viaje a Burdeos para exhibir su idea en la Feria Vinitech-Sifel 2024 en Francia y formar parte de la Misión “Sustenta Vitis Innovation Tour” organizada por WofA junto a su partner europeo Interco Nouvelle-Aquitaine, con los principales referentes de la industria vitivinícola mundial.
"Frente al desafío que se nos presentó, comenzamos a formar un equipo y a explorar diversas soluciones con el objetivo de dar un valor agregado a los residuos de la industria vitivinícola”, explicaron las y los creadores de 4m3.bio.
Un proceso innovador
Este proyecto de biofabricación recupera la biomasa sobrante de la agricultura como los sarmientos, escobajo de uvas u orujos que se generan tras cada cosecha y en general se queman o entierran. “Los trituramos para darle una consistencia similar a la yerba mate, luego a eso le inoculamos un hongo para que su estructura radicular se convierta en un producto que tiene una consistencia similar al telgopor”, dijo Mike Bravo, titular de la bodega y del proyecto.
Explicó que se trata de un material nuevo con el que buscaron reemplazar el packaging de madera o cartón que se utiliza para embalar los vinos, que además nace de la propia planta que los produce.
Pero aclaró que la intención no es convertirse en una empresa o una unidad de negocios de packaging sino entregar este proceso de innovación para que sean cada una de las bodegas las que produzcan sus propias cajas.
“Buscamos que las bodegas puedan cultivar su propio packaging utilizando dos ingredientes: los restos de poda y hongos”, sintetizó María José Laciar, una de las integrantes del proyecto junto a María Laura Hidalgo, Desiree Lepori y Kevin Alcalde, quienes hace cuatro años vienen desarrollando esta innovación.
Con esta iniciativa, 4m3.bio transforma residuos de poda en biocajas hechas con hongos, que son compostables, aislantes, resistentes y personalizables, ofreciendo una alternativa sostenible para el sector vitivinícola y resolviendo así dos de las grandes necesidades que evidencia la industria: la gran cantidad de residuos orgánicos que genera y la necesidad de empaques sostenibles.