Triple impacto
Se calzó el zapato de la sustentabilidad y va por más
Una industria de calzado profesional santafesina presentará en su primer reporte de sustentabilidad las acciones que viene realizando para transformar su forma de producir
Por: Eugenia Langone mail
En 2023 logró mejorar hasta un 70% el consumo energético en una de sus líneas de producción, tiene una escuela de formación de oficios propia dentro de su planta, mide su huella de carbono y está ordenando las acciones medio ambientales que ya venía realizando para medir los impactos del proceso productivo. Todo esto y más es lo que la empresa de calzado de seguridad Maincal, plasmará en su primer reporte de sustentabilidad.
Con 500 empleados y una fábrica de 18 mil metros cuadrados en el Parque Industrial de Pérez, la firma está decidida a “visibilizar lo que venimos haciendo y establecer metas”, definió Silvina Brunenberg, gerenta de recursos humanos de la compañía quien destacó la “apuesta social que hizo la empresa en 2019” a través de la incorporación, dentro de su planta, de un espacio de formación para mujeres vulneradas.
La compañía - que funciona desde hace 60 años y que tiene en su línea de producción dos marcas de calzados para uso profesionales como Funcional y Voran - lleva ya más de una década trabajando sobre el concepto de impacto ambiental. Ahora se propone ponerlo en números.
“Es necesario pensarlo en el marco de una compañía transparente y que mide su impacto social y ambiental”, explicó Brunenberg, quien recordó que desde 2012 la empresa incorporó el concepto de "valor económico sustentable y sostenible” y eso además, “empezó a ser parte de las decisiones de negocios” de la firma.
“Lo que no se mide, no se puede mejorar”
Brunenberg reconoció que tomar la decisión de medir los impactos del proceso productivo “fue un camino largo”, y agregó: “Se tomaron definiciones estratégicas sobre acciones que ya se venían haciendo más desordenadamente y se definió dónde enfocar los recursos a partir de los cuatro pilares sobre los que venimos trabajando: medio ambiente, desarrollo humano interno, comunidad y emprendimiento”.
Convencida además de que “lo que no se mide, no se puede mejorar”, Brunenberg explicó que los registros incluyen también el relevamiento de la huella carbono donde “una de las grandes cuestiones a mejorar es el consumo energético en las líneas de producción”, señaló.
"Se tomaron decisiones estratégicas sobre acciones que ya se venían realizando y se enfocaron los recursos en cuatro pilares: medio ambiente, desarrollo humano interno, comunidad y emprendimiento"
Tanto es así que los equipos de ingeniería y mantenimiento ya trabajaron a lo largo de 2023 y lograron mejoras de hasta un 70% en una de las líneas de producción, en una experiencia que ahora se trasladará a otros sectores. La empresa trabajó junto a Alpa Huella de Carbono, quien realizó esta medición para Maincal, en el período 2021-2022
La Maquinita del Talento
Los reportes, indicó la gerenta, “son importantes para mostrar datos y también los impactos sociales que se generan en lo social en la comunidad, además del ambiente”. Y un gran ejemplo de ese proceso y de esa vinculación con el territorio es “La maquinista del talento”, una experiencia que la firma puso a funcionar a partir de la necesidad de contar con mano de obra calificada.
“La sustentabilidad tiene que atravesar el negocio y conectarse con las personas, para que el impacto sea para todos”, señaló la ejecutiva antes de comenzar a relatar el proceso que se comenzó a gestar en 2021 a partir de la necesidad de incrementar su producción e incorporar personal. En ese momento necesitaban 60 operarios y sólo lograron incorporar a 30 personas a su planta a través de los medios tradicionales de selección de recursos humanos.
“Siempre tuvimos el sueño de tener una escuela de oficios, específicamente necesitábamos personal que conociera el oficio del aparado (zapatero) y ahí apareció la oportunidad, que comenzamos a trabajar con el municipio de Pérez”, relató.
“La Maquinita del Talento”, como se llama la escuela, tiene una formación de tres meses, aunque originalmente se había pensado en seis. Funciona en la misma planta de la compañía y por allí pasaron ya 99 personas, de las cuales 45 se incorporaron a la empresa y sigue funcionando.
“Trabajamos con la Municipalidad, ellos ponen la bolsa de trabajo y las becas durante las cuatro horas de formación diaria y después se lleva adelante el proceso de selección tradicional”, explicó la gerenta, que suma otro elemento: “Esto se llevó adelante junto a la Secretaria de Género de Pérez, con lo cual se trabajó con mujeres víctimas de violencia de género y violencia doméstica, quienes a través de ese proceso lograron ingresos propios e independencia económica”, dijo.
“Sin esas personas no podíamos aumentar la producción de la empresa, por lo que fue una solución beneficiosas y exitosa para todos”, recalcó Brunenberg, con la convicción que el triple impacto “es un camino para adelante en la economía, que ya no admite pasos hacia atrás”.